Cómo mi compañera de despacho, a quien cariñosamente apodo "la puta", siga comentando cada cosa que hace en voz alta, una de dos: o cojo un taladro del taller y me trepano el cerebro yo mismo, o, lo que es mucho más probable, la defenestro desde el primer piso donde trabajamos y se queda como un vegetal para el resto de sus días.
Ahhhhhhhhh!!!
ResponderEliminarEse ahhhh significa que ya la has tirado del piso? tranquilo chaval siempre hay "putas" y gilis por el mundo. Yo trabaje con una que radiaba hasta el nº de fotocopias que hacia y la despidieron, no se si por nuestros rezos o qué. Reza tu tambien a lo mejor tienes suerte.
ResponderEliminarSi te la quieres cargar, hazla colaboradora del blog, dile que postee algo y luego dejale uno de tus jocosos comentarios y que vea tus posts de obras de arte. Te garantizo que en una semana esta medio calva, tartamudea y sufre crisis de ansiedad. No hace falta que la defenestres ni que la tires por la ventan jejeje.
ResponderEliminarventana
ResponderEliminarUff, Junkie, qué cruel eres!! Tio, relájate, que eso es innhumano.
ResponderEliminarPor mi parte, "la cochinito" ha vuelto al trabajo, que estaba de baja. Y fijaos que casi me alegro de acabar de currar el viernes,...
Que bueno ser autónoma que no aguanto a compañeros de trabajo, jejeje
ResponderEliminar¿¿¿Cochinito??? A mi lo que me parece increible es que se ponga tacones y trajes blancos, cuando hay grasa y suciedad por medio, si es que....
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